¿AYUDAN LAS EXPERIENCIAS?

“La vida es muy diferente a la escuela. En la escuela primero aprendes la lección y luego te ponen la prueba. En la vida te ponen la prueba y luego aprendes la lección.”

Por experiencia entendemos la participación activa, vivida o sentida en hechos o acontecimientos que suceden en la vida cotidiana. Cuando tomamos conciencia de ello reflexionamos, lo que conlleva a que nuestras vivencias se  conviertan con el tiempo en experiencia. A través de nuestra vida guardamos en nuestra memoria experiencias de diferente índole lo que permite conocernos mejor.

Hay experiencias de vida aprendidas en el hogar, en el entorno familiar; en el trabajo, en las relaciones sociales, vida académica, etc., que viene aunada a la experiencia emocional (guardada en la memoria como recuerdo) múltiple y enriquecedora. La asociación de recuerdos aparece después, en un momento determinado, afectándonos positiva o negativamente. Lo cierto es que en la memoria se conservan, en gran medida, las emocionales.

experiencia3 Éstas, igualmente, juegan un papel importante porque actúan como un medio de comunicación (a la comunicación verbal, por lo general, le agregamos expresiones del rostro, el tono de voz y los gestos corporales) que reflejan nuestro mundo interno, cómo vivimos nuestro “yo” interior (con todo lo que sucede alrededor nuestro) e incluso, permite que entendamos parte de nuestra conducta. Hasta la emoción negativa redime su beneficio; se sabe que emplea parte de nuestra energía para descubrir nuestra potencialidad y toma las precauciones del caso, para prevenir o crear algo a partir de su aparición. No obstante, nuestra memoria es selectiva, “graba” solo lo que tiene real significado y puede hacernos variar la forma de ver el mundo al tomar decisiones o afrontar los conflictos en los momentos más críticos.

Por ejemplo, si nos circunscribimos a la familia nos quedan lecciones de experiencia que pueden perdurar toda la vida o no. Pueden ser buenas o …malas, pero que aprendidas de nuestros padres, suelen asumirse como “buenas” inconscientemente. Por señalar algunos breves ejemplos:

experiencia4Si la familia es muy religiosa, se le quedará a alguno de los hijos la costumbre de serlo; o, caso contrario, puede ocurrir que lo rechace.

Si los padres, por más discursos que den sobre puntualidad, no lo son, será el ejemplo que quede; así como también, si un padre suele ser violento, agrede físicamente a su familia. Un hijo (a) aprende de lo que ve y más, si esta experiencia si es repetitiva.

Por otro lado, toda otra experiencia fuera del hogar, de carácter social o académica, también es variada. Señalo una (opinión personal), una mayor exigencia académica obliga al alumno a dar lo mejor de sí, por lo tanto, al final genera un mejor “producto”. Además, es una experiencia útil para toda la vida.

En general, la idea es entender por qué algunas veces, uno tiene “ciertas” reacciones o costumbres “inexplicables”, pero si madura y racionaliza las cosas, descubrirá la causa.

Lo rescatable de las experiencias, es que hay personas que no obstante haber sufrido una serie de vicisitudes que les hizo la vida más difícil para unos que para otros, supieron salir adelante pues éstas sacaron lo sobresaliente de ellos, los fortalecieron, porque lo vivido enseña. Las experiencias son lecciones que quedan “archivadas” en nuestro subconsciente pero no olvidadas. Ahora bien, mucho depende de cómo una (o) lo asuma en el tiempo.

Puede llegar el momento en que aflore cuando le toque ser padre  o madre y repita, inconscientemente, los “patrones”  de conducta recibidos en la infancia (Análisis Transaccional)°. En algunos que fueron tratados con dureza en su infancia por padres o parientes les puede suscitar un rencor o resentimiento; en otro, al contrario, pueda que el dolor los humanice más en el tiempo y les ayude a comprender mejor a los demás. Las experiencias vividas se reflejan como un cristal de color a través del cual vemos el mundo. Algunas experiencias nos hacen ver a través de un lente oscuro, otras, en cambio, a través de uno claro y lleno de luz. Toca a nosotros quitar el cristal que distorsiona y afecta nuestra forma de “mirar” el mundo y de reaccionar.

. experiencia5Por último, uno debe ser consciente de las circunstancias que hemos pasado, y esto es lo más importante, asumirlas con madurez, racionalidad, y tomar la decisión más sana.  Porque está demostrado que cuando uno vive “cargado” de dolor y resentimiento, el único afectado en el tiempo, es uno mismo, pues no vive feliz. Cualquier emoción que se nos prolonga, es porque está siendo «alimentada» por nuestros pensamientos. ¿Habían reparado? Entonces, mejor evitar ese tipo de pensamientos que lejos de ayudar, al final, enferman Hoy tenemos que apreciar  las cosas de forma diferente porque somos adultos, más fuertes, capaces, más razonables. Recuerda que todo pensamiento que mantiene una emoción ingrata, dañina e innecesaria, es errónea y es necesario modificarla.

Y ahora que estamos pasando las circunstancias difíciles de la pandemia del corona virus (una nueva experiencia), ¿qué lecciones nos aportará?

¿Crees que cambiaremos en alguna medida?

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